🔸Activistas trans celebraron la aprobación de la ley frente al Congreso de México.
#CDMX | La llamada Ley Paola Buenrostro, que impone hasta 70 años de cárcel para quien asesine a una persona trans «por razones de identidad o expresión de género», ha entrado en vigor en Ciudad de México tras su publicación en la Gaceta Oficial.
La capital mexicana es la segunda entidad del Estado federal que saca adelante esta legislación. El primer estado fue Nayarit el primero de marzo pasado.
Esta ley incorpora el delito de transfeminicidio en el Código Penal local, que ahora contempla penas de 35 a 70 años de prisión. Su entrada en vigor sigue a su aprobación en el Legislativo de Ciudad de México el 18 de julio.
El jefe de Gobierno capitalino, Martí Batres, ha informado de que la sanción «se podrá agravar hasta en una tercera parte más» de la pena prevista si se dan ciertas causales.
Esas causales son, entre otras, «cuando la víctima presente señales de saña, cuando el delito sea cometido en el contexto de trabajo sexual, por dos o más personas o en presencia de testigos con quienes la víctima tuviera un vínculo de parentesco», ha añadido Batres.
También cuando la víctima sea menor de edad, adolescente, persona con discapacidad, adulta mayor, en situación de calle o bien haya recibido amenazas de muerte relacionadas con su identidad o expresión de género, de forma presencial o virtual.
«El nuevo tipo penal dice lo siguiente: ‘comete delito de transfemicidio quien prive de la vida a una mujer trans o a una persona cuya identidad o expresión de género, real o percibida, que se encuentre dentro del espectro femenino de género», ha indicado Batres.
El diputado Temístocles Villanueva, del Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y quien en 2021 presentó la iniciativa, atribuyó este logro a las activistas trans de la Ciudad de México.
«Hoy tenemos la responsabilidad de avanzar aún más, no todas las luchas están libradas, ni todas las causas están conquistadas, quedan muchas deudas», según el congresista.
La activista Natalia Lane, que sobrevivió a un intento de asesinato, reclama «una justicia que no solo castigue, que no solo incorpore causales de agravantes, incorpore años de cárcel» a los agresores, sino que también «repare, sane, acompañe a las víctimas y a las sobrevivientes».
Asimismo, Lane denunció que la Ciudad de México «no ha tenido los esfuerzos para garantizar la reparación y la no repetición a las mujeres trans, a las transmasculinidades y a las no binariedades».
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